La salvación se puede perder ? Es necesario cuidar la salvación ? Qué es la salvación ?

La salvación se puede perder ? Por qué la Biblia nos amonesta a cuidar la salvación ?  Como cuidar nuestra salvación ?

Parte de la confusión que existe en este tema  es por no aclarar qué es la salvación. Salvación ¿ de qué ó de quién y por qué ?

Brevemente salvación ¿ de qué?     ¿Qué es la salvación ?

Dios ha creado al ser humano con libre voluntad, y Dios ha puesto leyes morales, toda persona después de morir físicamente, rendirá cuentas a Dios de sus actos y Dios juzgará a toda persona y derramará su ira contra los que se hallen culpables de pecado.

Dios aborrece a quien comete pecado (quien transgrede sus leyes).

“Los insensatos no estarán delante de tus ojos; Aborreces a todos los que hacen iniquidad.” Salmo 5 : 5

Jehová prueba al justo; Pero al malo y al que ama la violencia, su alma los aborrece.” Salmo 11: 5.

“Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,  el cual pagará a cada uno conforme a sus obras:  vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad,  pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia.“ Romanos 2 : 5 -8.

Dios es justo y tiene que castigar al pecador por sus pecados, como los pecados se cometen ante todo contra la máxima autoridad de la Creación, (contra Dios Jehová), merecen después de la muerte física, un  castigo consistente en tortura sin fin en el lago de fuego y azufre.

Tortura eterna en el lago de fuego y azufre es el castigo que se merece toda persona por pecar contra Dios, aunque fuera con un solo pecado, para recibir la ira de Dios.

La salvación es que después de la muerte física se pueda escapar a la merecida ira de Dios contra nosotros por nuestros pecados, la salvación es que después de la muerte física, se pueda escapar del merecido castigo de tortura por siempre que nos corresponde por pecar contra Dios, transgrediendo sus leyes.

Es la salvación de la ira de Dios y del merecido castigo que nos debe sentenciar por nuestros pecados.

La salvación es literalmente ser salvados de que a nuestra muerte física, recibamos la ira de Dios contra nosotros, con su castigo eterno, cosas que merecemos por pecar contra El, transgrediendo sus leyes.

Cuando la persona muere físicamente, se encontrará en el infierno para recibir la ira de Dios por sus pecados, ó bien se encontrará a salvo de la ira de Dios, en el cielo, no hay ninguna condición intermedia.

Ejemplo paracaídas.

Las personas abordan un avión de guerra, como se trata de una guerra real, el vuelo será turbulento y el avión podrá ser derribado.

A bordo se les ofrece un paracaídas gratuito, unos no lo toman en serio, no se lo ponen, otros lo reciben cierto que lo recibieron gratis, pero no lo cuidan, no se lo ponen, piensan habrá tiempo de ponérselo en caso de que el avión caiga en picada.

Mientras el avión va volando, tanto el que tiene el paracaídas puesto como el que no lo tiene aún no están a salvo de vuelta en tierra firme. El avión recibe un ataque, va cayendo en picada, una persona que recibió su paracaídas, pero no lo cuidó, se lo quitó y ahora no lo encuentra, el otro nunca se lo puso, otro lo recibió y lo cuidó y lo mantiene puesto, como el avión va en picada, existe el riesgo de que caigan a tierra desplomados y mueran por el terrible impacto, mientras el avión empieza a caer ninguno está a salvo todavía en tierra firme. La forma en que trataron el paracaídas, será determinante para su futuro, el que recibió el paracaídas y no lo cuidó, y ya no lo encuentra, morirá ya sea que salte ó se quede en el avión, el que cuidó su paracaídas, salta, pero es hasta el momento en que cae en tierra firme con su paracaídas abierto, que podemos decir que ya está a salvo en tierra firme. Antes de eso, varias cosas podían pasar que evitaran su regreso salvo y sano en tierra.

Ahora veremos el carácter de Dios y su justicia, a través de varios textos Bíblicos y veremos si la ilustración anterior es aplicable al tema de la salvación y hasta que punto.

En qué momento se es salvo, cómo se da la salvación.

Jesús dijo que Dios envió a su Hijo únigenito, a Jesús (que es Dios hecho carne y hueso) para que todo aquél que crea en él tenga vida eterna. (Juan 3 : 16) Nótese en esta declaración de Jesús, que es para todo aquél, y no solo para unos cuantos elegidos ó predestinados, no existe la predestinación en cuanto algunos desde que nacen físicamente hagan lo que hagan vayan al infierno ó al cielo al morir físicamente. No existe tal predestinación. La otra cosa a resaltar es que dice es para aquél que crea en Jesús, es un acto de libre voluntad de la persona y es entre la persona y Jesús, si cree en él, no se trata de que la persona crea al predicador ó evangelista ni le confiese al predicador si cree ó no, es algo personal entre la persona y Jesús. Y nótese que dice para el que cree, en verbo presente continuo, porque algunos llegan a dejar de creer, como lo veremos adelante la misma Biblia habla de algunos que habiendo llegado a ser verdaderos cristianos abandonarán la fe.

Pero para entrar al cielo, Jesús mismo señala que es necesario nacer de nuevo.

Ante todo debo enfatizar que las palabras de Jesús, (Jesucristo) son las palabras de Dios Jehová hecho carne y hueso, son las palabras de Dios mismo. Y en ese nivel de autoridad están por encima de las de cualquier ser humano.

Qué hace la persona para ser salvo, y que hace Dios.

Jesús explicó que para poder entrar al reino de Dios es necesario nacer de nuevo, hablando a Nicodemo, Jesús le advierte que no se debe sorprender de que Jesús enseñe que con toda certeza la persona que no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios. (Juan 3 : 3 – 8).

Así que Jesús enseña que es necesario nacer de nuevo, nacer del Espíritu (Juan 3 : 5). El nacer de nuevo lo hace a uno un cristiano real, nacido de nuevo, una nueva criatura espiritualmente hablando.

Jesús enfatiza «No te maravilles que os dije: Os es necesario nacer de nuevo»  Juan 3 : 6.

Si Jesús indica que para entrar al cielo es necesario nacer de nuevo, entonces el que no nace de nuevo, no puede entrar al cielo, aún y cuando haya dado el primer paso en creer en Jesús.

Jesús indica que el deseo de Dios es que nadie se pierda, y para esto ha puesto el medio, para que todo aquél que crea en Jesús, no acabe perdiéndose sino que pueda tener vida eterna. (Juan 3 : 16).

Entonces lo que la persona puede hacer, lo que le toca a la persona es creer en Jesús.

¿Pero que es nacer de nuevo Bíblicamente? ¿El nacer de nuevo lo puedo hacer yo mismo ó lo hace Dios en mí?

El único tipo de cristiano real es el que es nacido de nuevo,  ya que no se nace siendo cristiano, no se hace uno un cristiano nacido de nuevo por nacer o crecer en hogar cristiano, no se es cristiano salvo por afiliarse a una religión, no se puede ser nacido de nuevo por ser miembro de una  congregación, iglesia ó denominación, no se puede ser nacido de nuevo  por asistir religiosamente cada semana a un templo ó a un lugar determinado, no se es cristiano nacido de nuevo  por «convertirse al cristianismo» como quien pretende adoptar una filosofía, no se puede ser salvo por repetir una «oración del pecador» como si fuese una fórmula religiosa, concepto que no es bíblico y que ni Jesús ni sus apóstoles enseñaron ni practicaron al predicar el evangelio.

Jesús asemeja esta experiencia del nuevo nacimiento espiritual, al nacimiento físico, señala que lo que nace de la carne, carne es y lo que nace del Espíritu, espíritu es (Juan 3 : 6) así que Jesús ilustra esta experiencia como un nacer de nuevo, pero un nacer espiritual.

Una persona nunca elige en qué momento nacer, nunca puede una persona elegir el momento de su concepción ni puede jamás elegir la fecha de su nacimiento ó su fecha de cumpleaños, pero nacerá al cabo de su periodo de gestación posterior a la concepción.

Jesús continúa enseñando después de enfatizar que es necesario nacer de nuevo,  que así como el viento sopla y uno no sabe de dónde viene ni a donde va, uno lo puede sentir y escuchar, y así es el caso de todo aquél que es nacido del Espíritu, es decir de todo aquel que es nacido de nuevo. (Juan 3 : 8). Haciendo las comparaciones anteriores la conclusión es que la persona para tener el requisito para entrar al cielo que menciona Jesús,  requiere nacer de nuevo, requiere tener un nacimiento espiritual, y lo podrá sentir y experimentar pero así como cuando se nace físicamente no se puede escoger ni elegir el momento del nuevo nacimiento, del nacimiento espiritual, llegará para la persona que será nacido de nuevo en el momento en que esté listo para nacer, llegará como el viento sin saber cuándo pero lo sentirá, la persona no podrá decir: «mmm creo que mañana es un buen día para nacer de nuevo».

Quien lee y sabe con certeza que ha nacido de nuevo, esto le sonará conocido, como ese nuevo nacimiento vino después de creer en Jesús (el periodo varía de segundos a años) como no se eligió la fecha del nacimiento de nuevo, y como las más de las veces ese momento es claro y queda marcado permanentemente en la memoria, y como llora uno arrepentido de pecar contra Dios bajo la convicción de pecado que trae el Espíritu Santo,  y ve uno y entiende a Jesús el Cristo como Dios mismo que se hizo carne para pagar el precio por los pecados de uno (Dios lo trae a uno a Jesús – Juan 6 : 44, 65). Y uno sabe con toda certeza que uno ha nacido de nuevo, no es que uno le haga a Jesús un favor en «aceptarlo» ni hacerle un favor de «hacer una decisión por El». Quien tiene la certeza de haber nacido de nuevo también puede identificar que posterior al nacer de nuevo, tuvo una marcada hambre y  necesidad de leer la Biblia y aprender más de la palabra de Dios, un «hambre y sed» de la palabra de Dios. Y como evidencia de ese nuevo nacimiento espiritual la persona  cambia y es hecha  una nueva criatura (2a Corintios 5  : 17) se empieza a alejar del pecado, no siempre el cambio es automático pero la persona lo siente y lo nota, las personas a su alrededor lo notan que es una persona distinta realmente.

Muy semejante  al nacimiento físico, al cabo del período de una gestación espiritual desde que la persona cree en Jesús, hasta que nace de nuevo, y tiene la certeza de que ha nacido de nuevo.

Habiendo nacido de nuevo entonces, siendo una criatura nueva, ya cumple un requisito que Jesús marca como necesario para entrar al cielo, pero el cristiano nacido de nuevo, aún no entra al cielo.

Salvación Inicial.

Se podría decir que el cristiano nacido de nuevo tiene una salvación inicial, como la persona que recibió el paracaídas.

Ya teniendo una salvación inicial la enseñanza de Jesús es que lejos de confiarse y lejos de poderse adormecer, se debe obedecer a Dios y cuidar la salvación, alcanzar la salvación final.

Ahora Jesús añade que los que entrarán en cielo no son los que le llaman Señor.  Jesús señala que los que entrarán al cielo son los que obedecen a Dios. Eso mismo señala un texto en Hebreos.

Véase el siguiente texto :

«No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?

 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.»   Mateo 7 :  21 – 23

En el pasaje anterior Jesús mismo está diciendo que entrarán en el cielo los que hacen la voluntad del Padre Celestial. Ciertamente primero Jesús enseño que para entrar en el cielo es necesario nacer de nuevo, pero ahora añade otra condición diciendo que es necesario obedecer a Dios, es necesario andar en sus mandamientos, andando en santidad.

Tenemos otro texto en el que el Señor Jesús, indica que para alcanzar la salvación final, existe la condición de permanecer en obediencia, y permanecer en la fe en Jesús.

Jesús dice: «De cierto, de cierto os digo que el que guarda mi palabra nunca verá muerte»  Juan 8 : 51.

Como obviamente los seres humanos estamos sujetos a la muerte física, la primera muerte («Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio» Hebreos 9 : 27) entonces Jesús se refiere a que quien guarda su palabra en obediencia, no verá la segunda muerte.

«Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda»  Apocalipsis 20 : 14

Entonces Jesús está señalando que una condición para alcanzar la salvación final es guardar su palabra en obediencia y fe en él.

Jesús enfatiza que aquéllos que lo obedecen son su verdadera familia:

“Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre” Mateo 12 : 50

Así que Jesús enfatiza que la obediencia a Dios es una condición para alcanzar la salvación completa y final.

El ser un creyente y seguidor de Jesús, conlleva la responsabilidad de obedecerlo, Jesús mandó que a los nuevos discípulos se les enseñe a obedecer las enseñanzas que Jesús les mandó obedecer a los primeros discípulos, «Id y haced discípulos…..enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado» Mateo 28 : 20.

Veamos el siguiente versículo en Hebreos que corrobora lo que dice Jesús, indicando que  Jesús es el autor de la salvación para quienes lo obedecen:

«y habiendo sido perfeccionado vino a ser autor de eterna salvación  para todos los que lo obedecen» Hebreos 5 : 9 muestra como es necesario que el nacido de nuevo se mantenga en obediencia a Jesús, Dios quiere que el nacido de nuevo le obedezca manteniéndose en santidad, guardando sus mandamientos.

Esto también se confirma en 1a Juan 2 : 17:

«Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre»

Nuevamente otro texto bíblico confirma que la condición de hacer la voluntad de Dios es necesaria para alcanzar la salvación final y vida eterna.

Como dice Apocalipsis 22 : 14:

 Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, y que entren por las puertas en la ciudad

Apocalipsis 22 : 14 (Reina Valera 1909)

Este es el texto que hace sentido (la traducción 1960 presenta varios problemas), este texto en la versión antigua, coincide con los demás textos bíblicos a lo largo de la Biblia, que hablan de guardar los mandamientos de Dios, (tales como:

“Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos” 1ª Juan 2 : 3

“y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él” 1ª Juan 3 : 22

“En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos.

 Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos” 1ª Juan 5 : 2 – 3

“Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” Apocalipsis 12 : 17

“Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús” Apocalipsis 14 : 12

Estos textos van de acuerdo en el concepto de que no solo la entrada es angosta sino el camino de la salvación es angosto, es un camino de mantenerse en fe en Jesús y de mantenerse en obediencia a los mandamientos de Dios, y de llegar a la muerte física en completa santidad (no hay santidad a medias) para poder ver al Señor, ya que sin santidad nadie lo verá.

Porque el que ha creído en Jesús y ha sido hecho una criatura nueva regenerada, nacido de nuevo por la obra del Espíritu Santo y se mantiene guardando sus mandamientos permanece en Jesús.

“Y este es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como nos lo ha mandado.

 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado” 1 Juan 3 : 23 – 24

De tal manera que entonces el que se mantiene creyendo en Jesús y se mantiene guardando los mandamientos de Dios y obedeciendo a Dios, alcanza la salvación final y la entrada al cielo, como lo dijo el Señor Jesús:

“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” Mateo 7 : 21

La Biblia a lo largo de muchos textos muestra que la entrada al cielo está condicionada a:

Arrepentirse del pecado para dejar de pecar.

Creer en Jesús, y mantenerse creyendo en él

Ser hecho una criatura nueva, regenerada, naciendo de nuevo espiritualmente y esto es algo que sólo lo puede hacer el Espíritu Santo.

Mantenerse en obediencia a Dios, guardando sus mandamientos.

Mantenerse en santidad, llegar en santidad completa y absoluta al momento de la muerte física, pues sin santidad nadie verá al Señor.

El obedecer a Dios, no son obras que te puedan hacer ganar salvación.

Ciertamente sabemos que la salvación no se obtiene por nuestras obras, pero cuando nacemos de nuevo, arrepentidos de pecado, pidiendo perdón a Dios por pecar contra él, nacemos de nuevo, somos justificados, pero Dios en ese momento prácticamente nos podría decir vé y no peques más, en otras palabras ya has sido hecho nueva criatura, regenerado, justificado ahora obedece y anda en santidad, no cometas más pecados.

El obedecer a Dios una vez que hemos nacido de nuevo, de ninguna manera significa que por nuestras obras ganemos nuestra salvación, si le dijeramos al Señor Jesús, «Señor me he ganado la salvación, por obras, porque te he obedecido, me he portado bien» Seguramente el Señor Jesús, diría: «Siervo inútil, tu obligación mínima era obedecerme».

«Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos»  Lucas 17 : 10

Si tú pretendes decirle al Señor Jesús, que tú te has ganado tu salvación por obras y que por lo tanto su sangre derramada fue inútil para tí, y que te has ganado tu salvación porque despúes de ser un vil pecador, llegó el momento en que te arrepentiste, creíste en él, naciste de nuevo y a partir de ahí, ya no seguiste fornicando, ni robando, ni cometiendo luguria, ni viendo pornografía, ni masturbandote, y que gracias a eso, si tu crees que esas son obras que dan salvación y tú crees que tus obras te dieron la salvación, seguramente Jesús te diría:

Siervo inútil, era tu obligación el dejar de pecar y andar en obediencia al Padre y santidad a partir de que naciste de nuevo.

Además de que es obvio que no has entendido, que nada de lo que hagas jamás, puede borrar tus asquerosos pecados contra Dios y su ley moral, y que Dios no te perdona así nada más, Dios mismo en la persona de Jesús – Dios Hijo, ocupó el lugar que tu merecías ocupar en la cruz, el murió como si hubiera sido pecador, siendo que Jesús fue y es santo y el pecador eres tú.

Igual que si pretendieras decirle al Señor Jesús, que porque desde que naciste de nuevo ya no pecaste mereces un premio, lo que mereces es que el Señor Jesús te diga: Siervo inútil, eso es lo que debías hacer, era tu obligación obedecer al Padre.

Después que la persona cree en Jesús y nace de nuevo por obra del Espíritu Santo, Dios quiere que el cristiano obedezca sus mandamientos, se mantenga en santidad, y se santifique, y que cuando llegue a caer en pecado sea pronto en arrepentirse sinceramente de su pecado y buscar andar en santidad no pecando más. De ninguna manera Dios estará apoyando que el nacido de nuevo, ahora ande en pecado, de ninguna manera Dios estará de acuerdo en que el nacido de nuevo que peque se mantenga en el pecado sin arrepentirse.

Jesús dijo que sus ovejas, sus seguidores, los cristianos, oyen su voz, y dice que sus ovejas lo siguen, y siendo así a éstas ovejas, a éstos cristianos que le siguen, obedeciendo a Dios Padre y sus mandamientos, obedeciendo a Jesús (Juan 14 : 15 y 23), entonces Jesús les da vida eterna, vida eterna sin más muerte y no serán arrebatados de él (Juan 10 : 27 – 28). Pero fíjese que Jesús enfatiza se trata de sus ovejas que oyen su voz y que le siguen, le siguen justamente oyendo su voz y obedeciéndole. Enfatizo que dice que las ovejas le siguen, es decir los cristianos le siguen ejerciendo su propia y libre voluntad la cual se conserva aún nacido de nuevo, no es que Jesús los obligue ni acarrée, Jesús no toma por fuerza a las ovejas, Jesús no obliga a las ovejas, a los cristianos a seguirle.  Tienes que entender y conocer el carácter de Dios, y como continuamente pone a prueba la obediencia del cristiano, y como Dios desea  que el cristiano someta su propia voluntad a la de Dios, por voluntad propia, Dios no obliga a los cristianos a obedecerlo. Tanto este pasaje de Juan 10:27-28 de que sus ovejas no le pueden ser arrebatadas así como el pasaje de Romanos 8:38-39 de que no hay cosa creada ni algo que nos pueda separar de Dios, enfatizan que no hay agente externo ni fuerza externa que nos pueda «robar» ó arrebatar de Dios, pero así mismo estos pasajes nunca señalan que uno mismo por apostasía, rebelión ó volver al pecado se separe a sí mismo por voluntad propia, de Dios.

Pero también es cierto que el cristiano verdadero, el que ha nacido de nuevo, llega a pecar, pero mientras tenga tiempo de arrepentirse de su pecado, de admitir su culpabilidad y confesarla a Dios, aún tiene remedio.

Porque cuando el cristiano llega a caer en pecado y como dice 1a Juan 1 : 9  «Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad», pero si el cristiano ya nacido de nuevo, peca y no se arrepiente y no confiesa su pecado ante Dios para pedir perdón, como podrá ser perdonado por Dios ? Y si ese cristiano muere en ese momento se cierra su expediente quedando con pecado que no alcanzó perdón porque el cristiano no se arrepintió y no lo confesó a Dios. Ya desde el Antiguo Testamento Proverbios 28 : 13 indicaba «El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia». Entonces si no los confiesa y no se aparta no alcanza misericordia.

Así a  lo largo de toda la Biblia, Dios muestra que no perdona el pecado sin arrepentimiento, sin remordimiento, un arrepentimiento genuino que significa cambiar y dejar de pecar.

Jesús habla de vencer, enfatiza el arrepentimiento, dice que no sólo la puerta es angosta sino que el camino también es angosto.

«El que tiene oído oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias: Al que venciere , le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios» Apocalipsis 2 : 7.

Jesús enseñó que la puerta es angosta, y que el camino a recorrer después de pasar a través de la puerta, también es un camino angosto, no solo basta con pasar a través de la puerta angosta, que es Jesús el Cristo, con un nuevo nacimiento sino que es necesario luego el andar por un camino angosto de santidad.  «Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan».  Mateo 7 : 14.

Alcanzar la salvación, cuando lleguemos a nuestra muerte física. La salvación final.

Pablo enseña: «sino que golpeo mi cuerpo y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado» 1a Corintios 9 : 27.  Pablo habla de golpear su cuerpo, es decir negarse a su naturaleza carnal, no vaya a ser que quede eliminado de la carrera que lleva a la salvación final. La salvación final se obtiene cuando el nacido de nuevo, el cristiano estando en santidad y en ese momento sin pecados expira el espíritu para encontrarse con el Señor, a quien nadie verá sin santidad.

Aquí Pablo al mencionar la palabra eliminado es en griego la palabra adokimos, que significa reprobado, no aprobado, y la cual es utilizada claramente en otros versículos para significar rechazado, reprobado, como se utiliza en Romanos 1: 28, 2a Corintios 13 : 5 – 7, 2a Timoteo 3 : 8, , Tito 1 : 16, Hebreos 6 : 8.

«si en alguna manera llegase a la resurrección de entre los muertos. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús» Filipenses 3 : 11 – 12. Aquí Pablo señala su deseo de llegar a la resurrección, a la salvación final, consciente de no haberla alcanzado aún, pero lejos de confiarse, prosigue adelante.

«Y esto conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos»  Romanos 13 : 11. Aquí Pablo en lugar de decirle a los cristianos que se pueden confiar y adormecerse los amonesta para estar despiertos, el tiempo final se acerca y la salvación final ya está más cerca que cuando creyeron ó nacieron de nuevo y tuvieron la salvación inicial. Si como dice Pablo la salvación está más cerca, es que aún no estamos en ella, aún no estamos en la salvación final, en la meta, aún no estamos en el cielo con Dios, aún no estamos a salvo de que al morir físicamente, recibamos sui ira y castigo, aún no se cierra nuestro expediente.

«que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero» 1a Pedro 1 : 5.  Cuando aquí el apóstol Pedro nacido de nuevo escribe a otros nacidos de nuevo (es decir personas con la salvación inicial) habla de alcanzar la salvación final, como indica para el tiempo postrero. Mientras no se alcanza la meta aún no se termina la carrera, un salvavidas puede meterse al mar a salvar a una persona, pero la persona salvada tiene que obedecer las instrucciones del salvavidas y perseverar en llegar a la playa, y ya que esté en la playa entonces si puede afirmar que está a salvo finalmente.

Todos estos pasajes hacen sentido cuando entendemos que es la salvación, como expuse antes,  es que a nuestra muerte física escapemos la ira y el castigo de Dios que justamente merecemos por nuestros pecados, si se trata de la salvación de un evento que se da después de nuestra muerte física, entonces la salvación (final)  se alcanza justamente posterior a nuestra muerte física.

Previo a nuestra muerte física aun no se ha cerrado nuestro expediente, lo que ocurre durante nuestra vida física determina los eventos que se dan posteriores a nuestra muerte física.

«Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fé en la verdad»  2a Tesalonicenses 2 : 13.

Aquí como explico en otro artículo la traducción correcta es os haya escogido como primicias, (no desde el principio no hay predestinación para salvación), para salvación mediante santificación, ya que la salvación inicial es por nacer de nuevo, la salvación inicial no es por obras (Efesios 2 : 9) aquí Pablo se refiere a la salvación final que se obtiene cuando nacidos de nuevo  con la salvación inicial, entonces sí mediante la santificación se obtiene la salvación final, porque una vez nacido de nuevo con la salvación inicial sin santidad nadie verá al Señor (Hebreos 12 : 14).

Como cuando Jesús enseña: «Entonces dijo Jesús a sus discípulos: Si alguien quiere venir en pos de mí, niéguese a si mismo, y tome su cruz, y sígame» Mateo 16 : 24.    Jesús no enseñó en confiarse en que la salvación se conserva automáticamente, Jesús lo que enseña es a negarse a uno mismo, negar la naturaleza carnal y así cargar nuestra cruz, ya que Jesús no cargará nuestra cruz, eso nos toca a cada uno de nosotros, el negarse nos corresponde a nosotros no a Jesús, así que un cristiano nacido de nuevo debe ser responsable, cuidadoso y diligente en hacer eso que le toca en negarse a sí mismo, tomando su cruz, en lugar de ponerse a pensar que ya su salvación no la puede perder, pero si el cristiano empieza a confiarse, adormecerse, y a fantasear, puede descuidarse y dejar de negarse a sí mismo cada día.

Jesús utilizaba en su enseñanza el lenguaje de vencer, de que el cristiano debe ser un vencedor ante la situación problemática que enfrenta en el mundo, pues bien dijo: «…En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo»  Juan 16 : 33.

Jesús promete que el camino y la vida en este mundo será difícil y habrá problemas pero debemos perseverar y vencer.

«»Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse» Romanos 8 :18

El que persevere hasta el fin, éste será salvo.

«Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre, mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo» Mateo 10 : 22.

«Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo» Mateo 24 : 13 cuando Jesús habla de los tiempos aun peores que están por venir sobre el mundo, la implicación es que quien no persevere hasta el fin no será salvo, lo cual es lógico, aquel que se dé por vencido antes de tiempo cometiendo ciertos actos que mencionaré adelante, puede entonces perder su salvación, siendo responsable de sus propios actos, jamás se puede culpar a Dios ni a Jesús por un nacido de nuevo que desiste en perseverar haciendo uso de su libre voluntad.

Nacido de nuevo se conserva la libre voluntad. Los judíos que salieron de Egipto no entraron a la tierra prometida porque en el camino no anduvieron en santidad.

La posibilidad de que una persona no conserve su salvación es que cuando una persona nace de nuevo, y tiene la salvación inicial, conserva su libre voluntad, al nacer de nuevo no se convierte en un robot que a partir de allí siempre obedecerá a Dios, el nacido de nuevo sigue siendo humano y aún tiene libre voluntad para actuar.

Considere el caso del pueblo judío, sacado de Egipto, salvado de la plaga de la muerte en Egipto, por atender y creer a Dios y cubrir sus puertas con la sangre del cordero (Exodo 12) y salieron de Egipto, ya tenían una libertad y salvación inicial de Egipto, pero aún faltaba que llegaran y entraran a la tierra prometida, pero para llegar a la tierra prometida habría que recorrer un camino, sin embargo al recorrer ese camino en lugar de obedecer a Dios y creerle, los judíos (incluso Moisés) desobedecieron a Dios, cayeron en pecado y en incredulidad.

Habiendo salido de Egipto, la falta de santidad en su camino les costó el no poder entrar a la tierra prometida.

Pero si en el camino a recorrer hubieran andado en santidad obedeciendo y creyendo a Dios, hubieran podido entrar al reposo de la tierra prometida.

Parece muy ingenuo pensar que los judíos hubieran llegado a razonar que porque ya habían salido de Egipto ya tenían asegurada su entrada a la tierra prometida sin antes recorrer el camino, y que con base en ese razonamiento pensaran que teniendo la entrada asegurada podían caer en pecado sin que esto tuviera consecuencias que impidieran su entrada a la tierra prometida.

El caso del pueblo de Israel que fue liberado por Dios de Egipto pero luego no entro finalmente en la tierra prometida por desobedecer a Dios, por no mantenerse en obediencia a El, me recuerda el caso de la esposa de Lot.

La esposa de Lot, salvación inicial al salir de Sodoma, pero por no obedecer a no voltear atrás, quedó a medio camino.

En el caso de Lot y su familia Dios envió ángeles para salvarlos del juicio que vendría sobre Sodoma, pero Lot y su familia no fueron forzados a salir, los ángeles le dieron instrucciones a Lot, de hecho el resto de su familia estaban invitados a salir de Sodoma para escapar su destrucción, pero sus yernos no obedecieron y sufrieron la destrucción.

Aunque la esposa de Lot obedeció y salió de Sodoma, después de haber salido, se le ordenó que no mirara atrás, ya había salido de Sodoma para escapar el juicio que vendría, sin embargo, se mantuvo atrás de Lot y miró atrás, de tal forma que no llegó a lugar seguro y murió ahí mismo convertida en sal.

Dios no salvó a la fuerza a Lot y su familia, envió mensajeros con un mensaje para que obedecieran, los ángeles (mensajeros) no secuestraron a Lot y su familia, ni les vendaron los ojos, ni los tomaron por la fuerza para cargarlos para salvarlos,  les dieron las instrucciones que debían obedecer para llegar a lugar seguro, les dieron instrucciones que Lot y su familia debían obedecer para ser salvos de la destrucción que Dios traería como juicio justo y castigo sobre su ciudad.

Dios hizo la provisión de medios para su salvación, pero luego fue la responsabilidad individual de Lot y familia en cuanto a obedecer para llegar a lugar seguro a salvo.

Aunque en principio la esposa de Lot obedeció y salió de Sodoma, conservó su libre voluntad pero estimó en poco la instrucción de no voltear atrás, no tuvo el temor de Dios para obedecer, a pesar de que había visto el milagro de los ángeles que llegaron y se hospedaron en su casa, y de enterarse seguramente de cómo habían causado ceguera en los hombres que querían atacarlos, a pesar de haber estado tan de cerca de esos milagros, desobedeció y miró hacia atrás, después de salir de Sodoma su obediencia a Dios aún se ponía a prueba, insisto que Dios no la salvó a la fuerza respetó su libre voluntad y puso a prueba su obediencia.

La esposa de Lot tuvo la salvación inicial al salir de Sodoma, pero no llegó a la salvación final a un lugar seguro, pues a medio camino desobedeció.

«Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos. Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga.»  1a Corintios 10 : 11 – 12

Si puedes entender estos ejemplos terrenales y físicos, puedes entender el simbolismo espiritual.

Sin embargo hay quienes piensan que por tener una salvación inicial al nacer de nuevo, ya tienen asegurada su salvación final con la entrada al cielo aún y cuando caigan en pecado continuo y sin arrepentimiento y que el mismo no tenga consecuencias, llegan a pensar que porque salieron de Egipto con un nacimiento de nuevo, pase lo que pase entrarán al cielo prometido y por tanto pueden recorrer el camino a la tierra prometida aún cayendo en pecado y sin arrepentirse y aún así entrar al cielo.

La persona que ha nacido de nuevo y es inteligente cuidará su salvación andando en santidad y si peca se arrepentirá para dejar de pecar, pero la persona nacida de nuevo que es ingenua ó floja para pensar, se convencerá a si misma que por tener la salvación inicial al nacer de nuevo, y conservando su libre voluntad,  sus acciones ya son irrelevantes, piensa que sus acciones de pecado sin arrepentimiento no tendrán consecuencias.

Considere estos pasajes que detallan porque la generación de judíos que salieron de Egipto no entró a la tierra prometida.

“Mas tan ciertamente como vivo yo, y mi gloria llena toda la tierra, todos los que vieron mi gloria y mis señales que he hecho en Egipto y en el desierto, y me han tentado ya diez veces, y no han oído mi voz, 23 no verán la tierra de la cual juré a sus padres; no, ninguno de los que me han irritado la verá”    Números 14 : 21 – 23

“entre tanto que se dice:     Si oyereis hoy su voz,     No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.  ¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés?

 ¿Y con quiénes estuvo él disgustado cuarenta años? ¿No fue con los que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto?

¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que desobedecieron? “  Hebreos 3 : 15 – 18.

“Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia, otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo:
Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones.

 Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día.

 Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios.

 Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.

 Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.”   Hebreos 4 : 6 – 11

Evidencia bíblica de que si se puede perder la salvación inicial, es decir no alcanzar la salvación final.

La condición de ser hallado digno del rapto se puede perder así como la salvación se puede perder, ya que la Biblia señala que sin santidad nadie verá a Dios (Hebreos 12:14), el riesgo de enseñar que la salvación no se pierde o que basta con ser creyente o asistir a una congregación para ser hallado digno del rapto o de que al morir se esté en la presencia de Dios, es que esa enseñanza falsa ayuda a la agenda de Satanás, porque la naturaleza pecadora del humano se inclinaría mas a pensar algo así como “bueno no estaré al 100% en santidad pero aún así seré hallado digno del rapto o de morir e ir al cielo, pues creo en Jesús como salvador y me reúno con creyentes y me enseñaron que la salvación no se pierde así que puedo seguir practicando algunos pecadillos, y no creo que el haber descargado ilegalmente esa canción sea realmente un robo, no hace falta arrepentirme”.

El mismo Jesús lo dijo y quedó asentado en la Biblia en Apocalipsis 3:5 (en un mensaje a la iglesia, a los cristianos) donde Jesús dice que el nombre de una persona anotado en el libro de la vida puede llegar a ser borrado en el caso de aquéllos cristianos nacidos de nuevo que pecan y luego no se arrepienten y no velan y no saben que el Señor puede venir en cualquier momento sin previo aviso.

La advertencia dada por el mismo Señor Jesús en Apocalipsis 3 : 5 de que el nombre de una persona que ha sido anotado en el libro de la vida puede llegar a ser borrado, es una advertencia verdadera, dada por el Señor Jesús, Dios hecho carne y hueso, así que para aquél que diga que no puede ser cierto, vale recordar que sea Dios verdadero y todo hombre mentiroso (Romanos 3 : 4) y que esta advertencia verdadera procede de Jesús, Dios Hijo el Fiel y Verdadero como se le llama en Apocalipsis 19 . 11.

Y por eso Jesús enseñó una parábola de siervo que pensó su amo tardaría en volver y tenía tiempo de pecar y tal vez  arrepentirse después de pecar,  pues siendo su siervo tal vez pensó no le haría nada malo y sin embargo Jesús indica claramente como ese siervo que pecó y fue encontrado infraganti fue puesto con los infieles y allí mismo en esa parábola por eso indica que el siervo que conociendo la voluntad del Señor no la hizo será castigado más severamente que aquél que siendo digno de castigo no conocía la voluntad de Dios. (Lucas 12: 41-48).

En Mateo 24 : 45 – 51,  Jesús mismo muestra en la parábola que el amo que a su regreso encuentre a su siervo siendo fiel, lo pondrá sobre muchos bienes, pero si ese siervo se confía pensando que su Señor, su amo no le hará nada malo, porque es siervo de él, y ese siervo obra mal, incluso comiendo y bebiendo con los borrachos, no siendo responsable, y queriendo justificar sus malos actos diciendo que como es siervo del amo y aún tiene tiempo para obrar así, el amo con toda intención regresará para pescarlo en la comisión de sus pecados, y entonces lo pondrá con los hipócritas en el infierno.

Esta parábola habla del amo, del Señor, Dios y de sus siervos, de Jesús y sus discípulos, digamos los cristianos genuinos, porque cuando regresa el Señor Jesús para establecer su reino en la tierra, al que encuentra siendo obediente y fiel, le pone sobre más responsabilidades, pero al que encuentra en pecado y desobediencia le pone como hipócrita en el infierno, porque dice ser siervo del Señor y obra pecados, pensando que no puede perder su posición como siervo del Señor, (que no puede perder su salvación). El primero fue puesto sobre más bienes y responsabilidades como recompensa por fidelidad, pues ya tenía salvación inicial, de ninguna manera se puede interpretar que el siervo fiel es una persona no creyente que por hacer buenos actos, se compra su salvación y es recompensado por el Señor en la era por venir, de ninguna manera es eso, sino un siervo fiel, un cristiano, que se encuentra en santidad y obedeciendo al Señor, (cuidando su salvación, dando fruto) y por eso el Señor le da responsabilidades y galardones en la siguiente era. Pero si ese cristiano genuino, ese discípulo de Jesús, es encontrado en desobediencia, pecando, no obrando de acuerdo con lo que Jesús espera de él, este discípulo es considerado inútil para el reino de Dios, y será puesto junto con los hipócritas, esto es una seria advertencia y llamaada de atención que debe alarmar no a los pecadores e inconversos, sino a los discípulos de Jesús genuinos.

Los cristianos nacidos de nuevo, tienen aún mayor responsabilidad de obedecer a Dios, y andar en santidad.

En Apocalipsis 3, en el mensaje de Jesús a los cristianos de Laodicea, les dice que por ser tibios, los vomitará de su boca, que mejor ilustración de no alcanzar la salvación final.

Jesús les da consejo y les conmina a arrepentirse, nótese que no los obliga, a la fuerza no salva, si piensa que Jesús hace estas advertencias de borrar el nombre del libro de la vida y de vomitar de su boca a cristianos, si piensa que Jesús hace advertencias sin fundamento y sin posibilidad de que sea verídico, me parece que usted tiene ya serios problemas al desconocer el carácter de Dios y de Jesucristo.

Hebreos 6:4 – 6 indica que un cristiano nacido de nuevo  puede recaer y más aún este pasaje indica que para tal persona ya no es posible arrepentirse y por lo tanto pierde su salvación,  eso dice el pasaje al indicar «es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento…» Aunque la realidad es que un cristiano nacido de nuevo si puede llegar a pecar, sin embargo   el Espíritu Santo le acusara de pecado y si esa persona está sensible se puede arrepentir. Pero Dios no obliga al cristiano nacido de nuevo a arrepentirse. Eso es de cada uno.

El riesgo grave es que un cristiano caiga en pecado y no se arrepienta y la muerte le tome de sorpresa, porque con pecado,  es decir sin santidad nadie verá al Señor y como hemos visto en pasajes anteriores, y en otros más adelante, Dios no perdona el pecado del cristiano que no admite su culpabilidad y no se arrepiente.

Veamos lo que el Señor mismo dice en Ezequiel 3 : 20 cuando amonesta al profeta Ezequiel «Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de él, él morirá, porque tu no lo amonestaste, en su pecado morirá, y sus justicias que había hecho no vendrán en memoria;  pero su sangre demandaré de tu mano.»

Veamos en el siguiente texto, de Ezequiel 33:

11 Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de Israel?

12 Y tú, hijo de hombre, di a los hijos de tu pueblo: La justicia del justo no lo librará el día que se rebelare; y la impiedad del impío no le será estorbo el día que se volviere de su impiedad; y el justo no podrá vivir por su justicia el día que pecare.

13 Cuando yo dijere al justo: De cierto vivirás, y él confiado en su justicia hiciere iniquidad, todas sus justicias no serán recordadas, sino que morirá por su iniquidad que hizo.

14 Y cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; si él se convirtiere de su pecado, e hiciere según el derecho y la justicia,

15 si el impío restituyere la prenda, devolviere lo que hubiere robado, y caminare en los estatutos de la vida, no haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá.

16 No se le recordará ninguno de sus pecados que había cometido; hizo según el derecho y la justicia; vivirá ciertamente.

17 Luego dirán los hijos de tu pueblo: No es recto el camino del Señor; el camino de ellos es el que no es recto.

18 Cuando el justo se apartare de su justicia, e hiciere iniquidad, morirá por ello.

En el pasaje anterior apreciamos:

Dios insiste en mencionar que quiere que el que peca se arrepienta, esto es que el pecador reconozca y admita que ha pecado contra Dios, y muestre remordimiento, se arrepienta genuinamente, realmente dejando de pecar, incluso con hechos concretos como reponiendo lo que se robó.

Si el cristiano nacido de nuevo peca y justifica su pecado, en lugar de comprar un libro cristiano le saca copias para no pagar tanto por el, ó lo descarga ilegalmente de internet, se justifica diciendo que no tiene dinero ó que es para ministrar, pide prestado dinero y no lo paga justificándose diciendo que no tiene dinero,  no admite que el fornicar es pecado sino que se justifica diciendo lo hace por amor, si justifica su ver pornografía y cometer lujuria y masturbación, y no admite su culpabilidad y se justifica diciendo que está solo satisfaciendo una necesidad sexual sin pecar, si el nacido de nuevo, no paga la música y la roba descargándola ilegalmente de internet y se justifica diciendo es para ministrar ó porque no tengo dinero, y en tales casos no admite su culpabilidad, no admite haber pecado contra Dios, no puede haber arrepentimiento y así Dios no puede perdonar, si el cristiano muere en ese momento así se cierra el expediente con pecado no arrepentido, no muere en santidad,, no alcanza la salvación final, y tal persona no puede culpar a Dios de que no lo salvó, no puede culpar a Jesús de que no lo salvó, cuando ese  cristiano abrazó su pecado y no se arrepintió de su pecado.

Dios insiste en que quien peca y se arrepienta, ya no peque más sino que ande en santidad.

Es ilógico que Dios perdone al cristiano que no admite haber hecho mal.

Si ese cristiano peca y no admite haber pecado contra Dios y por lo tanto no se arrepiente, ese cristiano que robó, que no pagó deudas,  que justificó su fornicación, que justificó su lujuria al ver pornografía, el que se suicida, etc., y muere,  se cierra su expediente con pecado no arrepentido y de nada le cuenta su previa justificación recibida de Jesús, ni le cuenta los días que anduvo en santidad.

Entienda bien el versículo 13, aún y cuando Dios le haya dicho que de cierto viviría, tal cristiano por su propia culpa y confiarse de su justica peca y no se arrepiente, morirá, pero morir en pecado significa la segunda muerte, la cual es en el lago de fuego y azufre.

Es ilógico que un cristiano que aún no está en el cielo, se confié como si ya estuviera ahí y piense que no puede perder su salvación, y que en lugar de preocuparse por andar en santidad y de arrepentirse realmente cuando peca, ande por la vida como si ya estuviera en el cielo, descuidando su salvación, confiándose y minimizando el riesgo y posibilidad de pecar y no arrepentirse.

Algunas personas cristianas pero inmaduras echan la responsabilidad de su salvación final en Dios, y en su ignorancia espiritual ó será ceguera espiritual ó inmadurez espiritual o será que Satanás logró engañarlos, se deslindan de su propia responsabilidad de mantenerse en santidad en todo momento, de cuidar  la salvación (Hebreos 2 : 1-3).

“Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos.

 Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución,

 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron,” Hebreos 2 : 1-3

Cierto que la salvación la da Dios mediante Jesucristo por su misericordia y gracia, es gratuita, es un regalo, pero quien nace de nuevo, el cristiano, debe cuidar tan grande regalo de salvación que ha recibido, debe ser responsable y cuidadoso, no descuidar tan grande salvación que ha recibido de Dios, y no descuidar significa cuidar, cuidar mediante la obediencia a Dios, el mantenerse en santidad y obediencia a Dios es el ve y no peques más.

Una actitud de inmadurez espiritual y de irresponsabilidad espiritual es la de pensar, » ya nací de nuevo y no puedo perder la salvación a Dios le toca ahora todo lo demás»  pero un cristiano que busca madurar espiritualmente buscará cuidar su salvación andando en santidad, guardando los mandamientos de Dios en todo momento y cuando llegue a pecar, arrepentirse pedirle perdón a Dios y no volver a pecar.

Considere la historia de Ananías y su esposa, nacidos de nuevo por creer en Jesús, salvos y llenos del Espíritu Santo hasta que quisieron engañar a Dios, y murieron, tuvieron tiempo de arrepentirse desde que desearon mentir hasta que llevaron el dinero a Pedro, pero entregando el dinero a Pedro se les acabó el tiempo para poder arrepentirse y pedir a Jesús les limpiara ese pecado (Hechos 4: 31-36, 5: 1-11).

Parte del problema con quienes creen que no pueden perder la salvación jamás, aún y cuando tengan pecados inconfesos y ó que continúen practicando, es que no han entendido que Dios es un juez justo y que tiene que hacer justicia.

Debido a que la salvación inicial se puede perder ó en otras palabras, la persona que cree en Jesús y que luego es regenerada por la obra del Espíritu Santo no alcanza la salvación final debido a su irresponsabilidad y descuido,  es que la Biblia amonesta en 2a de Corintios 7:1 cuando Pablo se dirige a los cristianos diciendo «puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios», es decir que si fuese cierto que la salvación no se pierde (esa mentira de que una vez salvo siempre salvo entonces no tendría sentido ni necesidad de continuamente andar en el temor de Dios apartándose del mal andando en santidad y limpiándose continuamente.

Siervo cristiano que peca por omisión al no dar fruto y es echado al infierno.

La parábola de los talentos (Mateo 25: 14-30) ilustra como un hombre llama a sus siervos para confiarle sus bienes y se va para regresar después de un tiempo y pedirle cuentas a sus siervos sobre la utilización y aprovechamiento de los talentos y bienes que les confió.

Los dos primeros siervos rinden cuentas positivas ya que utilizaron los talentos y con ello ganaron más. Entonces su amo los felicita y les llama siervos buenos y fieles, indicando que como en lo poco han sido fieles, sobre mucho les dará autoridad, y además les dice que entren a su gozo.

El caso del tercer siervo es radicalmente distinto, pues al rendir cuentas el siervo alega que como sabía que su amo era duro y siega donde no sembró, tuvo miedo y en lugar de utilizar el talento para rendir más fruto, lo mantuvo escondido sin utilizar.

A lo cual su amo le dice Siervo malo y negligente, ya sabías que siego donde no siembro, hubieras por lo menos dado el talento al banco para que ganara intereses,  el amo da órdenes de que se le quite el talento y se le dé a los siervos buenos y fieles.

Además el amo, da órdenes de que el siervo malo y negligente sea echado en las tinieblas de afuera donde será el lloro y crujir de dientes.

Al estudiar la parábola es importante considerar que:

– Ilustra parte del funcionamiento del reino de los cielos.

– El amo da a sus siervos algunos talentos según su capacidad, el amo es Dios ó Jesús y sus siervos son aquéllos que le sirven, los seguidores de Jesús ó cristianos. En esta parábola las tres personas son siervos, lo cual se interpreta como que los tres son cristianos.

– El amo, Jesús,  regresa al cabo de un tiempo, para pedir cuentas a los cristianos de cómo usaron sus talentos, Jesús regresará y premiará a cada cristiano según su obra “He aquí yo vengo pronto y mi galardón conmigo para recompensar a cada uno según sea su obra”.  Apocalipsis 22 : 12

“Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo”  2ª Corintios 5: 10. Estas palabras las dirige Pablo a la iglesia en Corinto es decir es un mensaje a los cristianos.

También aquéllos que finalmente caigan al infierno y sean echados al lago de fuego y azufre son juzgados según sus obras  Apocalipsis 20 : 12

– Los dos primeros siervos buenos y fieles, reciben autoridad sobre mucho, en la parábola similar de las minas el amo les da autoridad para gobernar sobre ciudades (Lucas 19 : 17 y 19)

– Jesús con esas parábolas enseña que cristianos fieles que dan fruto serán puestos en autoridad en su reino y gobernarán junto con él,  enseña que no todos los cristianos serán puestos en autoridad para gobernar y que habrá diferencias en autoridad según las obras que cada uno haya hecho.

– La parábola muestra que el tercer siervo del amo, es decir un cristiano que no dio fruto es un siervo malo y negligente (perezoso y holgazán son otras acepciones de la palabra original griega utilizada), es decir que su amo lo regaña por no dar fruto, y esto es un pecado (de omisión ó por no hacer) y por ello es echado al infierno, pues el lugar donde será el lloro y crujir de dientes en otras parábolas es el infierno, como se ilustra en Lucas 13 : 28, Mateo 22:13.  Además sabiendo que la salvación no es por obras («Porque por gracias sois salvos por medio de la fé y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras para que nadie se glorié» Efesios 2 : 8-9) Por lo tanto, no es que el siervo no logre su salvación por falta de obras, sino que habiendo tenido un nuevo nacimiento ó salvación inicial y por lo tanto siervo de su amo, se esperaba de él fruto de siervo, pero por su falta de fruto acaba en el infierno.

Jesús también enseñó que quien no permanece en El y no da fruto es echado al fuego.

“Todo pámpano que en mi no lleva fruto, lo quitará, y todo aquél que lleva fruto, lo limpiará para que lleve más fruto” Juan 15: 2

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que permanece en mí,  y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano y se secará y los recogen y los echan en el fuego y arden” Juan 15 : 5-6

“Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego” Mateo 7 : 19

El caso de este tercer siervo es radicalmente lamentable y es distinto al caso del siervo  que cumple con los mandamientos de Dios, como enseñó Jesús en Lucas 17 : 7-10.

“¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara ó apacienta ganado, al volver él del campo, luego le dice: Pasa y siéntate a la mesa ? ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después de esto, come y bebe tú? ¿Acaso da gracias al siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no. Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que ha sido ordenado, decid:  Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer hicimos”.

Los siervos ó los cristianos que cumplen con obedecer las leyes de Dios, no hacen algo extra simplemente cumplen con las leyes básicas de Dios y no merecen recompensa, por eso en la parábola se les llama siervos inútiles,  quienes hacen más que solamente cumplir las leyes de Dios, serán recompensados según sus frutos (obras adicionales). Por ejemplo no sería digno de ser recompensado el cristiano que dijera a Dios: “Señor dame un premio pues he obedecido tu mandamiento y no he matado a nadie”.

Pero aquél siervo ó cristiano que es negligente, perezoso, holgazán y no da fruto con el talento que Dios le ha dado, es recriminado y echado al infierno, aún y cuando haya sido siervo del amo, (cristiano), por cometer pecado de no dar fruto.

Lamentable caso de un cristiano que puede perder la salvación y ser echado al fuego del infierno por no dar fruto.

 

Algunas cosas  que pueden hacer que un nacido de nuevo, pierda su salvación a medio camino y no entre al cielo.

Los siguientes pecados ó transgresiones a la ley de Dios que cometa un cristiano y por las cuales no se arrepienta y/ó continúepracticando sin luego arrepentirse, y le llegue la muerte guardando esos pecados sin arrepentimiento, significan pecados guardados y manchas a una santidad sin la cual nadie verá a Dios.

– No perdonar a otros sus ofensas y morir sin haberles perdonado sus ofensas.

(Mateo 6 : 14 -15 «Por tanto, si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;  pero si no perdonáis sus ofensas a los hombres, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas»   y Mateo 18 : 35). Gálatas 6:8 «No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará».  Si un cristiano nacido de nuevo que conserva su libre voluntad no perdona a otro su ofnesa y a pesar de la exhortación del Espíritu Santo a perdonarlo, decide no perdonar al otro y la muerte le llega de sorpresa sin tiempo a perdonarlo, entonces muere guardando esa falta de perdón y rencor, muere abrazando ese pecado y lejos de morir en santidad muere prefiriendo su pecado de falta de perdón a preferir perdonar, Dios no puede perdonarlo tal como señaló Jesús. Dios es un juez justo, también por esto Jesús enseñó la parábola del hombre y el deudor al que perdonó y éste que no perdonó la deuda al otro (Mateo 18 :  21 -35).

Si eres un cristiano nacido de nuevo obedece a Jesús y perdona al que te ofendió antes de que te llegue la muerte por sorpresa, no te vayas a encontrar demasiado tarde cosechando lo que sembraste y descubriendo que la salvación se puede perder por no perdonar a otro su ofensa, porque en tal escenario de nada te serviría argumentar que tal ó cual pastor ó predicador te dijo que la salvación no se podía perder.

Apostatar de la fe.

1a Timoteo 4 : 1 dice que:  «Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios»,  Para apostatar ó abandonar la fe en el Señor Jesús, es necesario haber tenido primero fe en Jesús.

Es evidente que algunos cristianos pueden abandonar la fe y de hecho este pasaje profetiza que esto ocurrírá en estos últimos tiempos.

Un cristiano que llega a entrar en desánimo ante los problemas que enfrenta y endurece su corazón ante la palabra de Dios, es presa fácil de las voces del diablo y sus demonios, y puede llegar a tal grado en el que piense y decida ya no querer nada con Dios ni con el Señor Jesús, despues de haber creído y haber nacido de nuevo por obra del Espíritu Santo.

Debido a que el verdadero creyente en Jesús y regenerado (nacido de nuevo por la obra del Espíritu Santo) pasa por pruebas y tribulaciones, los apóstoles predicaban y educaban a los nuevos creyentes a permanecer (en presente continuo) en la fe, «exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles – es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios»  Hechos 14  : 22.

Varios textos hablan con una advertencia severa de que el cristiano apostate de la fe, es precisamente porque es posible que un cristiano apostate de la fe, que estos pasajes son muy severos en su advertencia.

Tenemos estos pasajes:

«Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo,

y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero,

 y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio.

Porque la tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella, y produce hierba provechosa a aquellos por los cuales es labrada, recibe bendición de Dios;

 pero la que produce espinos y abrojos es reprobada, está próxima a ser maldecida, y su fin es el ser quemada»

Hebreos 6 : 4 – 8.

«Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados,

 sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios.

 El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.

 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? »  Hebreos 10 :  26 – 29

Es un caso extremo pero es posible que un cristiano nacido de nuevo por obra del Espíritu Santo, haga caso a demonios, que no lo pueden obligar nunca a tomar tal decisión sino que el cristiano mismo piense en tal condición de desánimo, cuando no ve respuestas de Dios, que prefiere ya no aceptar la salvación en Jesús, que prefiere ya no tener nada que ver, que prefiere vivir en pecado y pagar el mismo por sus pecados en el lago de fuego, a sabiendas de lo que significa la salvación en Jesús y lo que significa el tener que recibir el catigo de sus pecados.

Suena a algo extremo, pero si es posible que ocurra, el extremo es cuando no sólo llega a pensarlo sino que lo decide y entonces apostata de la fé, y muere en esa condición, habiendo negado la fe que puso en Jesús, digamos quitándo su fe en Jesús, y volviendo a incurrir en pecado, eso por su propia decisión, Dios no obliga a nadie a creer y poner su fe en Jesús, Dios nunca predestinó a nadie para que desde antes de nacer se tuviera una garantía de que algunos serían salvos y otros serían condenados al lago de fuego. Una condición para la salvación es creer en Jesús en presente continuo, no basta con haber creído una vez y luego apostatar de la fe.

Perseverancia en la fe en Jesús, requisito indispensable para alcanzar la salvación final.

El mensaje a través de todo el Nuevo Testamento es de amonestación a los creyentes en Jesús, a perseverar y mantenerse en la fe en Jesús y mantenerse en santidad en obediencia a Dios.

Es un mensaje a ser responsables.

El apóstol Pablo dice en su carta a los Colosenses, acerca de Jesús y la reconciliación que el hizo para con nosotros y Dios Padre:

“ 15 El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.

16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.

17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;

18 y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia;

19 por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud,

20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.

21 Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado

22 en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él;

23 si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo fui hecho ministro.” Colosenses 1 : 15 -23.

Nótese en los versículos 22 y 23, que si en verdad permanecemos fundados y firmes en la fe en Jesús, entonces seremos presentados santos y sin mancha delante de él, no hace falta un análisis muy profundo para entender que entonces cuando NO permanecemos fundados y firmes en la fe en Jesús, entonces NO seremos presentados santos y sin mancha delante de Dios.

El perseverar y mantenerse en la fe en Jesús hasta el final, (sea la muerte física ó el rapto de la iglesia) es una condición indispensable para alcanzar la salvación final.

Aquél que cree en Jesús y que incluso es regenerado por la obra del Espíritu Santo, pero luego se vuelve atrás, no es digno de alcanzar la salvación final.

«Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios»

Lucas 9 : 62

– No pagar deudas y morir sin cubrirlas

(Romanos 13 : 7 – 8).  Cristianos que contraen deudas y no las pagan, no le dan importancia a devolver el dinero que no es suyo y se lo quedan (lo cual es un robo). El no tener dinero no elimina el pecado, no cubre la deuda, si llega la muerte y se cierra el expediente con una deuda con un dinero no repuesto (con un robo), es un pecado no arrepentido. Algunos cristianos tratan de autojustificar su pecado de robo, de no regresar el dinero que pidieron prestado, de no regresar los artículos que pidieron prestados, pero esa autojustificación no elimina la falta, no elimina la deshonestidad y pecado de no regresar lo que pidieron prestado.

Si tiene deudas cúbralas, si no tiene dinero para hacerlo,  pídale ayuda a Dios para cubrirlas. El que el cristiano  no tenga dinero para cubrir deudas no elimina la obligación de cubrirlas. La Biblia nos enseña a cubrir deudas, a reponer lo prestado, recuerde el caso del hacha prestada que Eliseo hizo flotar en el agua, para que pudiera ser devuelta,  y el caso de la viuda que  tenía deudas, y Dios mediante Eliseo  le dió provisión de aceite para venderlo y  pagar sus deudas.

La práctica de los pecadores es tomar prestado, pedir prestado dinero ó alguna cosa y no devolverlo.

«El impío toma prestado y no paga» Salmo 37 : 21.

El pedir prestado y no pagar es un pecado equivalente al robo, es tomar algo de otra persona, del prójimo y quedárselo, mediante engaño ó mentira diciendo que solo es prestado y que lo devolverá, así que el cristiano nacido de nuevo que toma prestado y no paga y muere en esa condíción, muere en su pecado y los que mueren en pecado caen al infierno, no pueden entrar al cielo, pues sin santidad nadie puede ver a Dios.

– No pagar por bienes ó servicios obtenidos,  tratando de auto-justificarse.

(Exodo 20 : 15). Normalmente un cristiano no pensaría en robar un banco ó una tienda, pero es importante pensar en que ahora el internet y otros medios electrónicos pueden ser utilizados para ésto.

Un cristiano no pensaría en entrar a una tienda y robarse un disco compacto de música ó con software pero y si ese cristiano se auto justifica y obtiene ese software ilegalmente de internet, eso está tipificado como un robo por lo menos para efectos espirituales, si ese cristiano se auto justifica con sus propios razonamientos (es que no tengo dinero para pagarlo), ó es que es música para ministración, Acaso su auto-justificación  limpiará su pecado ?.

La realidad es que no,  y si después de cometer ese pecado no se arrepiente y no repone el daño, siempre y cuando sea posible,  lo cual sería evidencia de arrepentimiento real y genuino, aunque puede haber casos en que no sea materialmente posible reponer el daño pero Dios es capaz de perdonar a quien realmente se arrepiente, si ese cristiano  muere en su pecado entonces caerá en el infierno. Si usted está en dicha situación busque arrepentirse, repare el daño en todo lo que sea posible, (compre una copia legal del cd ó software, o de la canción de su cantante cristiano favorito que descargó ilegalmente de internet en lugar de comprarla, etc sí el caso es más complejo pídale ayuda y dirección a Dios para  corregirse.

El pasaje de Ezequiel 33 : 14 – 16, señala como Dios perdona a quien realmente se arrepiente, quien de todo corazón se arrepiente y lo demuestra reponiendo lo que se robó.

“Y cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; si él se convirtiere de su pecado, e hiciere según el derecho y la justicia,

 si el impío restituyere la prenda, devolviere lo que hubiere robado, y caminare en los estatutos de la vida, no haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá.  No se le recordará ninguno de sus pecados que había cometido; hizo según el derecho y la justicia; vivirá ciertamente.”   Ezequiel 33 : 14 – 16,

Un cristiano y aquí insisto me refiero a verdaderos cristianos nacidos de nuevo, , que en lugar de pagar por el album de su cantante cristiano favorito, decide comprar una copia pirata barata ó descargarlo de internet ilegalmente (sin pagar), ó lo mismo hace con una película cristiana, o en lugar de pagar por un libro cristiano que es para venta  y para no pagar por el libro, le saca copias ó lo descarga ilegalmente de internet, comete una transgresión a la ley de Dios, un pecado de robo por no pagar por bienes de los que se está haciendo y sigue siendo pecado aunque trate de auto-justificarse diciendo que es material cristiano, tan pecado como el cristiano que comete fornicación ó adulterio aunque busque auto-justificarse diciendo que ama a su pareja, tal cristiano debe arrepentirse de su pecado, confesarlo a Dios y como evidencia y fruto de su arrepentimiento dejar de cometerlo, como forma práctica yo aconsejaría que pague por lo que descargó ilegalmente de internet, descargando una copia legal y pagándola. Lo grave es el cristiano que sigue incurriendo en tales prácticas auto-justificándose y se le acabe el tiempo para arrepentirse ya que al morir estaría muriendo en pecado. Hay algunos ministerios que si ofrecen material para descargarse de internet gratuitamente y hay que distinguir esos casos.

Tienes en tu ipod música por la cual no quisiste pagar y en lugar de comprarla la bajaste ilegalmente de internet ó la copiaste de un cd de un amigo para no pagar por ella ? y aún así vas a la reunión el fin de semana a cantar a Dios ? Regulariza tu situación, antes que te tome la muerte por sorpresa y se cierre tu expediente encontrándote como ladrón. Elimina de tu ipod ó computadora la música que le cargaste ilegalmente sin pagarla, si quieres alguna canción, paga por ella, compra el cd ó cómprala en internet. No te tome la muerte por sorpresa y se revise tu expediente espiritual encontrándote culpable de robo, sin arrepentimiento, y caigas en el infierno, donde ningún predicador ó pastor podrá salir a defenderte diciéndote que se suponía que no podías perder la salvación.

Estando en el infierno no te servirá de consolación el recordar que esa canción la bajaste del internet y te ahorraste el dinero que costaba comprarla legalmente. En el infierno no tendrás tu ipod para oírlo.

– Otra causa puede ser el negar a Jesús y morir sin tener tiempo a arrepentirse.

Tal vez quien está leyendo no vive en una nación donde el ser cristiano, tener y leer una Biblia y congregarse con otros cristianos sea un delito, pero hay naciones en donde eso es considerado un delito y traición, algunos cristianos en esos países son sometidos para negar su fé en Jesús y de no hacerlo morir, es cierto que así es como muchos cristianos en esos países mueren como mártires prefiriendo no amar sus vidas por encima de su amor y fidelidad a Jesús, pero que hay de aquéllos verdaderos cristianos nacidos de nuevo que flaquean y no vencen ese momento y niegan a Jesús, y aún así son asesinados sin tiempo de arrepentirse de haber negado a Jesús ?     La Biblia habla de aquéllos mártires que menospreciaron sus vidas hasta la muerte, en Apocalipsis 12:11 «Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte».  Jesús dijo: «Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también lo negaré delante de mi Padre que está en los cielos»  Mateo 10:33.

Pedro negó a Jesús, pero tuvo tiempo luego para arrepentirse.

El caso de este hombre cristiano, negó a Jesús, bajo la presión de estos musulmanes, que amenazaban con cortarle la cabeza, entonces haciendo uso de su libre voluntad, estimó más su vida física, y declaró la herejía de que Ala es grande negando a Jesús.

Aún así los musulmanes le cortaron la cabeza matándolo, sin tiempo para arrepentirse y pedir perdón a Dios, sin tiempo de admitir su culpabilidad de negar a Jesús, sin tiempo de arrepentirse ni de tener remordimiento, fue asesinado.

Jesús dijo que si alguien lo niega, el lo negará ante el Padre, los mártires que están con Jesús en la vida eterna son los que no estimaron su propia vida física por encima de Jesús.

“Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también lo negaré delante de mi Padre que está en los cielos” Mateo 10 : 33

Para los cristianos que se lleguen a encontrar ante una situación similar hay quien recomienda que en lugar de decir lo de ala es grande repitan el Padre nuestro.

Me viene a la memoria un caso de una madre y sus dos hijos, que fueron amenazados con que los matarían si no renunciaban a su fe en Jesús, esto me parece fue en Asia, no era un país musulmán, pero lo que recuerdo es el relato de que ante la mirada de preocupación de los niños viendo a su madre, ella les dijo, No se preocupen niños, ésta noche cenaremos con Jesús, no negaron a Jesús, y los mataron físicamente, pero esa noche estaban en vida eterna ya con Jesús.

“Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y reinaron con Cristo mil años” Apocalipsis 20 : 4

“Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte” Apocalipsis 12 : 11.

El video donde se muestra al cristiano que es forzado a convertirse al Islam, y quien luego declara que Ala es el único dios, es difundido por Theodore Shoebat,  él es cristiano pero su padre fue miembro de la Organización de Liberación Palestina y activista de la hermandad Musulmana.

Aqui el enlace al blog de Theodore.

Sobre el video Theodore menciona lo siguiente:

Por Theodore Shoebat:

“Un hombre cristiano fue capturado por musulmanes en Siria y forzado a declarar el Shahadatan (“No hay dios sino Ala y Mahoma es su mensajero”). Después de decir el credo herético, ellos lo consideraron como un infiel de cualquier forma y brutalmente lo decapitaron.

Rescate de Cristianos está trabajando ahora en el terreno en Siria y en Irak ya que somos socios con la Hermana Hatune Dogan quien ya ha salvado miles de cristianos de la muerte. Podemos salvar y proteger más cristianos en Siria e Irak con su ayuda. La Hermana Hatune ha sido premiada con la Orden del Mérito del gobierno Alemán por su trabajo (equivalente a la Medalla de Honor del Congreso). Nuestro contacto de Siria encontró el video de esta decapitación el cual no ha sido expuesto a los medios occidentales hasta ahora, y con traducción al inglés.

Como una lección, si usted se encuentra alguna vez en tal situación como ésta, no diga el credo Islámico (ó Musulmán), sino el Padre Nuestro.

Los cristianos sirios están siendo perseguidos cada día, con violación, decapitación, secuestro y todo tipo de violencia horrible.”

Advierto que el video muestra una escena muy cruel, no fácil de digerir y no fácil de olvidar. Pero para aquéllos cristianos que aún creen que sin aceptar la responsabilidad de sus actos, en un acto tal como negar a Jesús no pierden su salvación, me gustaría que lo vieran y meditaran sobre ello.

Abajo el enlace al video.

http://www.liveleak.com/view?i=026_1393880424

– Un cristiano que se suicida. No tiene tiempo para arrepentirse de su pecado de suicidio.

Por ejemplo el caso del hijo (de 27 años) del famoso pastor Rick Warren autor del libro «Una vida con propósito» que se suicidó de un balazo. El caso de un cristiano que se suicide es que está cometiendo un pecado de auto-homicidio y no tiene tiempo de arrepentirse.

Tom White exdirector de la Voz de los Martires al parecer  murió por suicidio, esto  después de acusaciones de haber abusado de una menor.

Es un hecho que un cristiano nacido de nuevo puede pasar por problemas y sufrir depresión y opresión demoníaca (aún los cristianos pueden estar demonizados) los demonios llegan a oprimir y poner pensamientos pero no pueden obligar a la persona incluso cristiana a matarse a si mismo, si el cristiano no se aferra a Jesús y no busca apoyo en intercesión y oración, sino que decide darse por vencido y cobardemente matarse a sí mismo (cometiendo homicidio contra sí mismo), comete un pecado y si el suicidio resulta exitoso no tiene tiempo de arrepentirse de su pecado, así que cae al infierno perdiendo su salvación. «Pero el que persevere hasta el fin, este será salvo» Mateo 24 : 13.  «Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda» Apocalipsis 21 : 8

– Un cristiano que no da absolutamente ningún fruto.

Como vimos anteriormente. El problema no es dar algo de fruto ó poco fruto sino que pudiendo dar fruto no se dé absolutamente nada de fruto.

Otra causa muy peculiar por la cual un verdadero cristiano nacido de nuevo pueda perder su salvación es por:

La marca de la bestia – Quien decide tomarla no tiene ya perdón –

Es digno de notar lo que la Biblia señala en cuanto a quienes deciden tomar la marca de la bestia:

– No se puede forzar a las personas a que la tomen, las personas aún pueden ejercer su libre voluntad para aceptarla ó rechazarla aún a costo de su vida.

– Toda persona que decida recibir la marca ya no tiene perdón, ya no es redimido.

«Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca de la bestia en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira: y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero, y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen,ni nadie que reciba la marca de su nombre» Apocalipsis 14 : 9 – 11  Reina Valera 1960

Aquí la palabra traducida como alguno – Si alguno adora a la bestia…. en el original griego significa cualquiera, ó toda persona – es decir que toda persona que adore a la bestia y reciba su marca será condenado eternamente, toda persona, como dice el versículo 11 – Nadie que reciba la marca de su nombre tendrá reposo ni día ni noche – sino que será atormentado con fuego y azufre por los siglos de los siglos.

Es claro y contundente el mensaje de que todo aquél que adore a la bestia y tome su marca será condenado eternamente, ya no es redimible, ya no tiene perdón.

Las personas tendrán aún la libertad de elegir entre adorar la bestia, su imágen y recibir su marca o bien negarse a hacerlo lo cual significa que serán asesinados.

«Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase» Apocalipsis 13 : 5.

«Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar;  y vi las almas de los decapitados que por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años» Apocalipsis 20 : 4

Este último pasaje señala que quienes por testimonio a Jesús se negaron a adorar a la bestia y su imagen y se negaron a recibir su marca fueron decapitados, para luego reinar con Cristo, en gran contraste con la condenación eterna que sufren quienes si adoraron la bestia y recibieron su marca.

De tal forma que:

– Quien acepta adorar la bestia, su imagen y recibir su marca ya no tiene perdón, sino que sufrirá condenación y castigo eterno en el lago de fuego y azufre.

De que forma Satanás trata de engañar a los cristianos.

No permita que Satanás le engañe a usted,  porque el diablo dice si ya eres salvo ya no te preocupes ya no tienes que velar por andar en santidad, el diablo le dirá ya eres salvo ya te puedes relajar y confiar y bajar la guardia. Todo lo contrario a lo que continuamente enseña la Biblia sobre andar en santidad y arrepentirse, velad y orad para no caer en tentación.

Recordaba a un ministro cristiano que ha tenido amplia experiencia en ministrar a personas atadas por el diablo y demonizadas y mencionaba que NUNCA ha visto el caso de una persona nacida de nuevo que haya podido ser liberada de sus ataduras demoniacas sin antes haber reconocido y confesado su pecado. Cuanto más es necesario que el cristiano que cae en pecado reconozca su pecado y lo confiese ante Dios para estar en santidad antes de morir.

Qué hay del cristiano que piense no puede perder su salvación y comete fornicación ó adulterio y en ese momento muere de un paro cardiáco ? muere en su pecado sin tiempo de reconocerlo, arrepentirse y confesar su pecado a Dios.

Y qué del cristiano que cree no puede perder su salvación y cae en la tentación de embriagarse y habiendo cometido el pecado de embriaguez, estando embriagado y borracho sufre un accidente y muere ?  Muere en su pecado sin tiempo de reconocer ante Dios su pecado, sin tiempo de arrepentirse y  confesarlo ante Dios.

Recuerde que Dios mató a Ananías y a su esposa, sin darles tiempo para arrepentirse.

«Pero si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, és es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso y su palabra no está en nosotros» 1a Juan 1 : 8 – 10.

Si usted aún cree que siendo nacido de nuevo, puede cometer pecado y sin  admitir su culpabilidad y reconocerlo antes Dios, y sin arrepentirse y sin confesarlo ante Dios, puede morir y entrar a su presencia, es que usted aún no conoce el carácter de Dios y Su santidad y su justicia  y Satanás le está viendo a usted como un ignorante presa fácil de sus mentiras.

Hace tiempo supe de una historia la cual me impactó, el caso real de un pastor, su hijo estaba estudiando en un Colegio Bíblico (ö Instituto Bíblico), a nuestro mejor entender el muchacho era realmente cristiano nacido de nuevo, pero seguía siendo un ser humano sujeto a pasiones y tentaciones. La noche previa a la graduación, el joven sucumbió a la tentación y junto con otros compañeros decidieron salir a festejar, pero bebiendo alcohol, triste pero cierto, se embriagaron y sufrieron un accidente en el automóvil en el que iban, el hijo de este pastor murió en el accidente, murió embriagado sin tiempo de arrepentirse y pedir perdón a Dios por su pecado, el pastor mejor conocedor de la verdad y santidad de Dios que muchos otros pastores, recibía la consolación de otro compañero pastor, pero el padre del hijo muerto dijo que no le servía de mucho llorar, pues sabía que su hijo sabía la verdad y desgraciadamente murió embriagado, murió  en pecado y ya del infierno no había salida.

Si usted aún cree que por ser un verdadero cristiano nacido de nuevo, (no de los que se creen cristianos sólo por asistir religiosamente a un lugar cada fin de semana, ó por haber rezado una oración), y cree que por haber nacido de nuevo, no puede perder su salvación y entonces no importa si cae y permanece en pecado, está usted jugando con su eternidad y tratando de burlar a Dios pero Dios no puede ser burlado.

La dañina enseñanza de que la salvación no la puede perder el cristiano, minimiza y va en contra de la continua instrucción a andar en santidad y a arrepentirse que encontramos en el Nuevo Testamento, en los mensajes que Jesús da a las iglesias en Apocalipsis, el llamado insistente es a arrepentirse, incluso diciendo que si no lo hacen vendrá cuando no lo esperen.

Algunos abandonarán la fe.

La Biblia señala incluso que en los últimos días algunos (tal vez muchos) abandonarán la fé (1era Timoteo 4:1) y que en los tiempos finales lejos de venir un avivamiento vendrá una gran apostasía es decir muchos creyentes que caerán en engaño del diablo dejando su fé en Jesús previo a la revelación del Anticristo (2a Tesalonicenses 2: 1-3), por eso Jesús decía «pero cuando regrese el hijo del hombre hallará fe en la tierra ?» (Lucas 18:8).

En algunos medios cristianos en algunas iglesias y congregaciones desgraciadamente ya no se predica sobre el pecado, el arrepentimiento, la realidad del infierno, el evangelio completo de salvación en Jesús y sobre santidad, no se predica sobre el regreso de Jesús y que vendrá por una iglesia santa y sin mancha, algunos cristianos consideran esos temas incómodos y prefieren se hable solo sobre bendiciones materiales,  se deleitan en una predicación semanal tipo conferencia motivacional y que se les diga que todo está bien  y que el diablo no es un enemigo del cual hay que preocuparse (contrario a lo que dice la Biblia en 1era Pedro 5:8).

Jesús enseñó: «Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado en el infierno» Mateo 5: 29-30.

Si acaso la salvación no la pudiera perder una persona que ha nacido de nuevo, aún cayendo en pecado, Jesús no hubiera dicho algo tan radical como lo anterior. Jesús fue muy radical al enseñar que si algún miembro del cuerpo es ocasión de caer en pecado es mejor cortarlo en lugar de caer en el infierno con el cuerpo entero.

Ninguna persona se debe confiar de que porque ha escuchado que la salvación no la puede perder entonces el caer en pecado no es cosa grave, (pues de alguna forma casi mágica tendrá tiempo de arrepentirse o no perderá su salvación aunque recaiga en pecado y no admita su culpabilidad antes Dios y no se arrepienta).

El mandamiento aquí de Jesús es corta de tu cuerpo esa parte que te hace pecar para que puedas entrar al cielo manco y no que caigas al infierno con todos tus miembros.

Conclusión.

La persona que ha nacido de nuevo (requisito indispensable para entrar al reino de Dios como Jesús enseña en Juan 3), y que naciendo de nuevo tiene una salvación inicial, debe conservar su salvación, andando en santidad y obedeciendo a Dios.

Sin embargo como aún puede llegar a pecar, si llega a pecar debe admitir su culpabilidad ante Dios, arrepentirse de su pecado (dejar de pecar, cambiar) y confesarlo ante Dios.

Dios no puede pecar al cristiano nacido de nuevo, que peca y no admite que pecó y por lo tanto no se arrepiente, y no confiesa su pecado ante Dios.

Si el cristiano muere en pecado no arrepentido, no muere en santidad y cae al infierno.

La Biblia nos amonesta continuamente aun como nacidos de nuevo a obedecer a Dios, andando en santidad y arrepentirnos de nuestros pecados, a vencer.

Es justo porque aún el cristiano nacido de nuevo conserva su libre voluntad para pecar ó para obedecer a Dios, que debe vencer las tentaciones, ó adversidades puestas por Satanás para que se rebele contra Dios, Dios mismo y Jesús hacen énfasis al nacido de nuevo en que debe vencer. Como dice Dios mismo en Apocalipsis 21 : 7  «El que venciere heredará todas las cosas, y él será mi Hijo».  Y como enfatiza Jesús en los mensajes a los cristianos en Apocalipsis capítulos 2 y 3, véase Apocalipsis 2 : 11 Jesús hablando a los cristianos dice: » El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte».  La segunda muerte es el lago de fuego y azufre como lo indica Apocalipsis 20 : 14 : «Y la muerte y el Hades (infierno) fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda», y Apocalipsis 21 : 8 «Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda».

«Seguid la paz con todos y la santidad sin la cual nadie verá al Señor»  Hebreos 12:14.

U cristiano nacido de nuevo,  es posible que no alcance la salvación final, como claramente lo establece la Biblia y Jesús en sus propias palabras, la enseñanza de que la salvación no se puede perder es falsa y es una mentira satánica para que los verdaderos cristianos nacidos de nuevo y hechos nuevas criaturas en Jesucristo se confíen y bajen la guardia para que caigan en una flojera e irresponsabilidad y adormecimiento espiritual, para que piensen que a partir de un nuevo nacimiento ya no son ellos responsables de sus propias acciones realizadas bajo su libre voluntad, para hacerle creer al cristiano realmente nacido de nuevo que a partir de su salvación inicial y nuevo nacimiento, no importa como viva su vida, «no puede perder su salvación», totalmente contrario a la amonestación bíblica para que aquellos cristianos que han nacido de nuevo, anden en santidad cuidando su salvación, contrario a la enseñanza de Jesús de que los que entrarán al cielo son los cristianos que obedecen a Dios.

Quienes promueven la enseñanza falsa de que la salvación no se puede perder (y si no se pude perder no hace falta cuidarla) están diciendo que no importa como viva su vida el cristiano nacido de nuevo, que entonces el cristiano nacido de nuevo puede estar en pecado practicando fornicación, viendo pornografía, robando (bajando canciones ilegalmente de internet), no pagando sus deudas, y que aun si no se arrepienten y la muerte lo sorprende,  aún así irá al cielo, LO CUAL ES FALSO.

Hay una frase popular que dice que no es bueno cantar victoria antes de tiempo, recuerdo un video donde un ciclista iba en primer lugar en una carrera y ya casi para llegar a la meta, confiado, decidió celebrar y levantar los brazos con lo cual perdió el control de la bicicleta y se cayó, con lo cual no sólo perdió el primer lugar sino el segundo tercero, cuarto, pasaron más de una docena de ciclistas delante de él en tan solo unos segundos, si para éstas cosas mundanas la persona inteligente y con sentido común es más cuidadosa de no cantar victoria antes de tiempo, cuanto más cuidadoso debe ser un cristiano nacido de nuevo para no perder algo aún más valioso y algo eterno.

Jesús es quien pagó el precio de su salvación con su propia muerte sobre la cruz, derramando su sangre inocente y El mismo menciona consus propias palabras en Mateo 6 : 14-15 que Dios no perdonará a quienes no perdonen a otros y en Apocalipsis 3 : 3-5 Jesús menciona a los cristianos que si no se arrepiente uno El borrará su nombre del libro de la vida, es porque El,  que es Dios mismo hecho carne y hueso conoce y domina ese tema por encima de cualquier predicador y pastor y líder de congregación.

Existen 2 personas ambas nacidas de nuevo,, la primera persona escucha a un pastor que dice que la salvación no se puede perder pero compara ese mensaje con la Biblia como indica Hechos 17 : 11 y aprende que conforme a la Biblia y Jesús ( y los textos antes mencionados) si se descuida si puede perder su salvación por lo cual decide cuidarla con temor a Dios y esmero esforzándose aún más por vivir en santidad obedeciendo a Dios y cuando llega a caer en pecado busca arrepentimiento inmediato y no pecar más.

La segunda persona escucha a su pastor decir que la salvación no se pierde y se confía en ello, sin estudiar esa enseñanza a la luz de la Biblia sin aplicar Hechos 17 :11 y piensa que entonces no tiene mucho sentido el esforzarse tanto por andar en santidad, da lugar a pecados considerando que son pequeños y no se arrepiente de ellos. Esta segunda persona es inmadura espiritualmente y no se da cuenta de que ahora es su responsabilidad mantenerse en santidad, de que no debe ser irresponsable ni flojo en ese sentido, no debe decir que ahora a Dios le toca hacer todo, debe guardar los mandamientos de Dios, no pecar, perdonar a los demás sus ofensas,  no autojustificarse, porque si cae en pecado y no se arrepiente y la muerte lo toma de sorpresa las consecuencias son fatalmente eternas. Y el pastor que le dijo que no podía perder su salvación no tendrá autoridad para sacarlo del infierno.

La primera persona es la prudente sensata e inteligente y temerosa de Dios, la segunda persona es insensata y descuidada de su salvación. (Mateo 25 : 1 – 13). La primera persona tal vez no pueda vivir en santidad todo el tiempo,  tal vez llegue a pecar pero se levanta busca arrepentirse y clamar a Dios por perdón y busca no volver a caer en pecado.

En la vida real el nacer de nuevo y tener el bautismo del Espíritu Santo no lo hace a uno un super cristiano que no pueda caer en pecado ya jamás, pero la clave está en que si cae en pecado se levante, se sacuda el pecado con sincero arrepentimiento clame a Dios por perdón y busque sinceramente no pecar más crucificando la carne cada día, y pidiendo al Espíritu Santo su ayuda para andar en el Espíritu y no satisfacer la carne y andar en santidad.

Le exhorto para que usted sea como la primera persona ya que la segunda persona es descuidada de su salvación y si cae en pecado y no se arrepiente pidiendo perdón a Dios caerá al infierno y no será justificada por decir que su pastor le enseñó que la salvación no podía perderse, o por decir que pensó que una vez nacido de nuevo ya no perdería su salvación aunque cayera en pecado y no se arrepintiera.

Si usted ama a alguien, a un familiar por ejemplo y usted quiere que su ser amado, que ya es nacido de nuevo, llegue a la salvación final,  ¿ Qué haría usted si ese ser amado estuviera cometiendo pecados ?, le enseñaría usted algo como bueno no lo cometas muy seguido, o arrepiéntete cuando acabe el fin de semana, total la salvación no se pierde, haría eso usted con su ser más amado ó le conminaría a arrepentirse y confesar su pecado inmediatamente y dejar de pecar inmediatamente no sea que la muerte le tome de sorpresa, a usted no le importaría incluso hablar de la realidad del infierno o perder hasta una parte de su cuerpo con tal de que no caiga al infierno sino que pueda alcanzar la salvación final.. (Mateo 5: 27-30, 10:28).

Repito qué harías con tu ser más amado si lo ves en pecado no arrepentido, le dirás no hace falta que te arrepientas, síguelo haciendo, total la salvación no se pierde  ?  Creo que si eres un cristiano nacido de nuevo y ya tienes cierta madurez espiritual no le dirías eso a tu ser amado,  así que tampoco lo hagas con los cristianos  a quienes les predicas, tú no tienes ninguna autoridad para salvarlos, ni para garantizarles la salvación, llámalos a andar en el temor de Dios en santidad.

El cristiano nacido de nuevo que ha leído esto, ahora tiene 2 opciones:

Opción 1- Andar en obediencia a Dios y santidad guardando sus mandamientos continuamente y cuando peque arrepentirse inmediatamente , confesar su pecado a Dios y pedirle perdón, no sea que la muerte lo tome de sorpresa con pecado no arrepentido, esta opción de obedecer a Dios es Bíblica, va de acuerdo a la voluntad de Dios, de acuerdo con su carácter revelado en la Biblia, y si practica esto, el riesgo de perder la salvación es prácticamente nulo. Esta primera actitud  te mantiene y acerca más a Dios. Es una actitud precavida, conservadora e inteligente.

Opción 2.- Confiarse en que no puede perder la salvación y por lo tanto, no tendrá temor de Dios en andar continuamente en santidad, cuando peque no tendrá la urgencia de arrepentirse inmediatamente y dejar de pecar.

Mantener esta segunda actitud te aleja más de Dios, es una actitud riesgosa, descuidada y poco inteligente.

Permanecer en pecado es como arenas movedizas, corre el riesgo alto de que cuando la muerte lo tome lo encuentre en pecado sin arrepentimiento, de tal forma que corre el riesgo alto de encontrarse en el infierno al morir. Pero estando en el infierno como ya leyó esto no puede argumentar que no sabía que podía perder la salvación, el argumentar que tal predicador le dijo que no podía perder la salvación no lo sacará del infierno.

Para que el cristiano no pierda la salvación, aún y cuando viva en pecado, aún y cuando continúe pecando y aún y cuando muera con pecados no arrepentidos ni confesados.

Si ese es tu caso, es decir, has creído en que Jesús derramó su sangre y murió en tu lugar, y has nacido de nuevo, has sido hecho una nueva criatura mediante el obrar del Espíritu Santo que te ha regenerado, pero aún deseas tener la tranquilidad y seguridad de que al morir irás al cielo aún y cuando continúes pecando, aún y cuando sigues practicando pecados de los cuales no te arrepientes, y quieres tener la seguridad y confianza de que si mueres en pecado, irás al cielo y no al infierno, entonces haz lo siguiente:

Dile a Dios que contrario a lo que Jesús ha dicho y lo que dice la Biblia, que siendo nacido de nuevo es necesario obedecerlo y andar en santidad, ó si se llega a pecar arrepentirse y confesarle tus pecados ( Mateo 7 :  21 – 23, Hebreos 5 : 9, 1ª Juan 1 : 9) dile que quieres tener la tranquilidad de poder pecar, de no perdonar sus ofensas a otros, de no admitir culpabilidad ni tener remordimiento ni arrepentimiento de los pecados que cometas y aún en esa condición, morir e ir al cielo.

Dile a Dios que quieres tener la seguridad de poder morir suicidándote, de morir mientras cometes fornicación, adulterio, morir sin pagar a otros el dinero que les debes (es decir robándoles), morir mientras estás embriagado e ir al cielo. Dile a Dios que si llegas a morir de un infarto en la cama de adulterio ó fornicación, que si mueres en un accidente al estar embriagado, que si mueres en un terremoto mientras ves pornografía y cometes lujuria, que si mueres por un aneurisma cerebral repentino, sin haber perdonado a otro su ofensa, sin haberle pagado el dinero que le debes (con pecado de robo), que si llegas a morir en pecado y sin tiempo de admitir tu pecado, sin tiempo de arrepentirte y confesarle tu pecado, dile que incluso así quieres ir al cielo.

Pídele a Dios que haga una excepción contigo, pídele que sea mal juez y juez injusto, que pase por alto tu pecado del cual no admites culpabilidad, que ignore tu pecado del cual no te arrepientes ni sientes remordimiento, que te perdone cuando tú no perdonas a otros sus ofensas, pídele a Dios que haga una excepción contigo.

Pero hay un gran problema, Dios no hace excepciones, es juez justo y si tú habiendo creído en que Jesús murió por tus pecados y habiendo nacido de nuevo por obra del Espíritu Santo, pecas y mueres sin haber admitido tu culpa, sin remordimiento y sin arrepentimiento, sin confesar tu pecado ante Dios, entonces a tu muerte física, Dios te pondrá con los hipócritas, en el infierno para que seas castigado justa y merecidamente, con un mayor castigo porque conociendo la voluntad de Dios y sus leyes morales, no las guardaste y las menospreciaste, pensando que no mereces perder tu salvación inicial y pensando que por haber nacido de nuevo tienes derecho a pecar de cualquier forma, porque en realidad lo que quieres es pecar cómoda y confiadamente, imaginándote que por haber nacido de nuevo ya estás exento de rendirle cuenta a Dios por tus pecados cometidos después de nacer de nuevo.

Como cristiano nacido de nuevo, tienes que morir físicamente en santidad para poder ver al Señor en el cielo, porque sin santidad nadie verá al Señor (Hebreos 12 : 14).

Si no perdonas a otros sus ofensas contra ti, entonces Dios no te perdonará tus ofensas (Mateo 6 : 14 – 15)

«No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?

 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad»  Lucas 13 : 21 -23.  Jesús señala que el cristiano debe estar haciendo la voluntad de Dios, para poder entrar al cielo.

Porque es conveniente que conozcas el carácter y justicia de Dios revelado en la Biblia, y saber que Dios no puede pasar por alto tus pecados por los cuales no te arrepientes ni le confiesas, porque Dios aún en el caso del cristiano que ha sido justificado por su fe en Jesús, si ese justificado a quien se le ha dicho de cierto vivirás, si peca confiando en que ha sido justificado, su justicia no será recordada (Ezequiel 33 : 12 – 13).

El siervo del Señor que confiadamente empezó a pecar, fue llamado a cuentas por sorpresa y recibió mayor castigo que otros porque conociendo la voluntad de su Señor, no lo obedeció (Lucas 12 : 42 – 48).

Ese siervo del Señor que fue llamado a cuentas cuando fue sorprendido en pecado fue puesto con los hipócritas en el infierno (Mateo 24 : 45 – 51).

Abajo el enlace al artículo:

Para que el cristiano no pierda la salvación, aún y cuando continúe pecando y aún y cuando muera con pecados no arrepentidos

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